-Hidrátate adecuadamente.
-Toma sorbos de agua aunque no tengas sed
-Consume más frutas y verduras. Sus antioxidantes nos protegen del envejecimiento prematuro.
-Renueva la crema hidratante que te pones en la mañana, conserva en tu gaveta del trabajo el mismo producto para colocártela regularmente. De esta manera el aire acondicionado no disminuirá la frescura de tu piel.
-Deja de lado los jabones de tocador con perfume. Opta por el jabón líquido con ácido láctico para que tu piel no se vea opaca, áspera y sin brillo natural.
-La manera como te secas el cutis también es importante. No restriegues el rostro, secalo suavemente, dando palmaditas.
-Si tienes piel seca usa lociones limpiadoras y tónicas específicas.
-Evita las bases y polvos que tapan los poros.
-Evita las cremas con aceites y agentes comedogénicos (que obstruyen los poros). Prefiere los productos a base de agua y propenilglicol. Las cremas hidratantes para piel seca no deben contener alcohol, pero sí agua, aceites, vaselina y ceramidas.
-Toma sorbos de agua aunque no tengas sed
-Consume más frutas y verduras. Sus antioxidantes nos protegen del envejecimiento prematuro.
-Renueva la crema hidratante que te pones en la mañana, conserva en tu gaveta del trabajo el mismo producto para colocártela regularmente. De esta manera el aire acondicionado no disminuirá la frescura de tu piel.
-Deja de lado los jabones de tocador con perfume. Opta por el jabón líquido con ácido láctico para que tu piel no se vea opaca, áspera y sin brillo natural.
-La manera como te secas el cutis también es importante. No restriegues el rostro, secalo suavemente, dando palmaditas.
-Si tienes piel seca usa lociones limpiadoras y tónicas específicas.
-Evita las bases y polvos que tapan los poros.
-Evita las cremas con aceites y agentes comedogénicos (que obstruyen los poros). Prefiere los productos a base de agua y propenilglicol. Las cremas hidratantes para piel seca no deben contener alcohol, pero sí agua, aceites, vaselina y ceramidas.
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